El reciente cambio al horario invernal en Chile reactivó la propuesta de dos diputados mendocinos que piden adaptar el huso horario argentino a su ubicación geográfica y piden extenderlo a todo el país.
El exvicepresidente y actual diputado, Julio Cobos, busca llevar al país al uso horario -4.
Adolfo Bermejo, diputado nacional por Mendoza, también respaldó esta iniciativa. Ambos solicitaron al presidente de la Comisión de Legislación, Santiago Santurio, que se priorice el estudio de esta propuesta.
En 2023, Mendoza ya aprobó una norma que planteaba cambios en los relojes de la provincia. El diputado Jorge Difonso argumentó que la modificación responde a recomendaciones de organismos técnicos como el Conicet. "Es necesario coordinar el reloj biológico de las personas con el horario del día y las horas de sol", afirmó.
El cambio al uso horario -4 podría tener implicancias en la salud de la población, en el ahorro energético y en la economía. Según Difonso, "cuando en Mendoza son las 8 de la mañana, en realidad son las 6.30 para el horario natural del cuerpo".
En el pasado, Mendoza estuvo cerca de aprobar esta modificación, pero el gobernador Rodolfo Suárez se opuso, argumentando que no era conveniente estar a contramano del resto del país. "Si todo el oeste cambiaba, Mendoza podía adaptarse, pero no ser una isla", expresó Suárez por entonces.
Además, agregaron que "consideramos que esta medida generaría ahorro de energía, mayor seguridad ciudadana y un mejor aprovechamiento de la luz natural durante el día”, esto publicó Bermejo en sus redes sociales, acompañando sus dichos con una copia del pedido formal.
Según el texto, esto permitiría ajustar las jornadas laborales y escolares a los momentos de mayor luminosidad y, como consecuencia, reducir el consumo eléctrico. “En invierno contamos con un promedio de 10 horas de sol, mientras que en verano ese número asciende a **14”, se detalla en el proyecto.